Ir al contenido principal

Historia de la salvación

Breviloquium

Historia de la salvación

27 de noviembre de 2022



          Dios que es amor (cfr. 1 Jn 4, 8), busca siempre entrar en diálogo con todos sus hijos, busca revelarse a cada uno de ellos y lo hace a través de palabras y obras. Sin embargo, esta revelación de Dios no acontece en un acto, sino de manera gradual, por medio de etapas que le van ayudando a crecer en amor y conocimiento de Dios, partiendo del encuentro personal con Él. Vamos a comenzar una serie de reflexiones, partiendo de la Sagrada Escritura, que nos aproximen y descubran ese plan de salvación que Dios tiene para todos sus hijos y que encuentra su plenitud en Jesucristo. En esta oportunidad daremos las claves para comprender mejor las etapas de la historia de la salvación.

          Jesús, Verbo de Dios encarnado, nos da a conocer la voluntad del Padre: «que todo el que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna y yo lo resucite en el último día» (Jn 6, 40). El designio de Dios es autorevelarse al hombre, salir a su encuentro, aún a pesar de sus caídas: «El Señor Dios llamó al hombre y le dijo: — ¿Dónde estás?» (Gn 3, 9). Por ello, con san Pablo afirmamos que Dios, Padre Bueno, «quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad» (1 Tim 2, 4).

          Este designio de Dios se ha ido desarrollando de manera histórica: «Muchas veces y de muchas maneras Dios habló en la antigüedad a nuestros padres por medio de los profetas» (Hb 1, 1). La revelación de Dios —como afirma la constitución Dei Verbum— «se realiza con hechos y palabras intrínsecamente conexos entre sí» (2). Comporta, por tanto, una «pedagogía divina»: «Dios se comunica gradualmente al hombre, lo prepara por etapas para acoger la Revelación sobrenatural que hace de sí mismo y que culminará en la Persona y la misión del Verbo encarnado, Jesucristo» (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 53; cfr. Hb 1, 2).

          El Catecismo nos presenta este plan de salvación en cinco etapas, cuatro de ellas dedicadas al Antiguo Testamento (nn. 54-64) y una al Nuevo Testamento (n. 65). La primera la dedica a la creación (nn. 54-55); la segunda señala la alianza con Noé (nn. 56-58); en tercer lugar figura la elección de Abraham (nn. 59-61); y para concluir la etapas preparatorias a la revelación plena, cierra con la formación del pueblo de Israel (nn. 62-64) como cuarta etapa.

          La quinta etapa, finalmente, expone el culmen de la revelación divina: Jesús, el Cristo, «mediador y plenitud de toda la revelación» (DV 2). Ha sido Él quien, de acuerdo a san Ireneo de Lyon, «ha habitado en el hombre y se ha hecho Hijo del hombre para acostumbrar al hombre a comprender a Dios y para acostumbrar a Dios a habitar en el hombre, según la voluntad del Padre» (Adversus haereses, 3,20,2).

          Cada una de estas etapas las podemos comprender siguiendo los tres ejes temáticos propuestos por Carlos Junco Garza: Dios pueblo y alianza. Dimensiones que se han de contemplar como una unidad: «un solo Dios que se liga en alianza con su pueblo elegido». La imagen de Dios que cada etapa nos revela, la alianza que se debilita o fortalece en cada una de ellas pero que nunca cesa, y el pueblo que peregrina por esta tierra entre fidelidad e infidelidad a Dios, con la consciencia de la misericordia de Dios que lo salva.

          En resumen, la historia de la salvación, el plan de salvación o «proyecto salvador [oikonomia]» (Ef 3, 9) obrado por Dios, comporta un acompañamiento por parte de Dios, una pedagogía; por lo cual, en las siguientes semanas expondremos estas etapas que nos propone el Catecismo, aproximándonos desde la perspectiva unitaria de Dios, la alianza y el pueblo. De fondo tendremos presente el encuentro con Jesús y su seguimiento.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Filosofía, ¿amor a la sabiduría?

Breviloquium Filosofía, ¿amor a la sabiduría? 27 de febrero de 2022           Hablar de filosofía es hablar de un estilo de vida apasionante, que va más allá de las apariencias, que busca encontrar aquello que aún no sabe si lo hallará, pero que genera una emoción por el simple hecho de buscar. La filosofía, para nosotros los creyentes, viene bien porque siempre estamos en búsqueda de algo o de Alguien. Hablemos un poco de este saber.            La definición etimológica de filosofía nos dice que se trata del «amor a la sabiduría». Esta definición surge a raíz de que los primeros pensadores griegos se llamaban a sí mismos «sabios», y Pitágoras, por modestia, quiso ser llamado «amante de la sabiduría» o «filo-sofo», de ahí resulta el término que hoy conocemos. Pero esta definición pronto se quedó atrás. En los tiempos de la auténtica cultura griega, filosofía es identificada con la sabiduría misma.         ...

Juan Martín Velasco: Increencia y evangelización

Breviloquium Juan Martín Velasco: Increencia y evangelización 5 de marzo de 2023           Tenemos frente a nosotros el volumen de Juan Martín Velasco, Increencia y evangelización. Del diálogo al testimonio , publicado por Sal Terrae en 1988, es el tomo 45 de la colección Presencia Teológica. El autor distribuye el contenido en dos partes, con siete y ocho temas respectivamente. Como se aprecia, la obra se sitúa en un momento histórico donde todavía no está aún arraigado la expresión «nueva evangelización», pero que, tomando las directrices de la carta magna sobre la evangelización de Pablo VI, Evangelii nuntiandi (8 de diciembre de 1975), y las intuiciones del Concilio Vaticano II, plantea «despertar en las comunidades cristianas un cristianismo confesante» (p. 10).           Para iniciar el diálogo, los cristianos tienen que situarse en el lugar existencial en que se encuentra el no creyente. Juan Martín Velasco señala como punto ...

Semblanza de Benedicto XVI (Joseph Ratzinger)

Breviloquium Semblanza de Benedicto XVI (Joseph Ratzinger) 8 de enero de 2023             Benedicto XVI, o por su nombre de pila, Joseph Ratzinger, nació el 16 de abril de 1927, en la ciudad de Marktl, del estado de Baviera, en Alemania. Fue el Papa número 265 de la Iglesia Católica, hasta su renuncia el 28 de febrero de 2013, retirándose como Papa emérito y dedicándose, desde entonces y hasta su fallecimiento, a la oración por la Iglesia y al retiro espiritual. Pastor y teólogo que enriqueció a la Iglesia principalmente por su teología, por la que fue mayormente reconocido.            En 1939 ingresa al Seminario menor de San Miguel, a la edad de 12 años. Su vocación fue creciendo de manera natural como lo afirmó en una entrevista. Sin embargo, a los 16 años fue llamado a las “Juventudes Hitlerianas” como ayudante de artillería antiaérea, de las cuales desertó ya en los últimos días de la guerra. Retoma sus estudios en 194...