Ir al contenido principal

Filosofía de la religión

Breviloquium

Filosofía de la religión

23 de octubre de 2022


          En el tratamiento del diálogo fe-razón, la filosofía aborda de manera frontal a la religión como su objeto de estudio. Puesto que la filosofía es un saber busca conocer la totalidad de las cosas y en sus últimas causas necesarias, se propone también tratar el ámbito religioso. Actualmente, podemos distinguir dos aproximaciones a la religión. Por un lado la filosofía fenomenológica y por otro la filosofía analítica. Una busca describir los fenómenos religiosos, la otra hacer una crítica a los argumentos para apoyar la creencia religiosa y el lenguaje religioso.

          Nosotros nos detendremos en una postura más analógica, tomaremos elementos tanto de la fenomenología, como de la filosofía analítica, buscando nuevos caminos para dar respuestas razonables a las preguntas que se plantean hoy a la religión, específicamente la cristiana y, de ella, la católica.

          En cuanto a la primera aproximación, la fenomenología se enfoca a tratar la religión como un fenómeno, describiéndola como una relación entre el hombre y Dios. De esta forma, los temas que de esta relación derivan son los de culto, personas y lugares considerados sagrados, en oposición a los profanos. Con esto, se reconoce que dichos elementos están en función del fenómeno religioso.

          Así mismo, la fenomenología de la religión estudia las actitudes que despierta la religiosidad en el hombre, entre ellas, la de dependencia a algo muy elevado, la de libertad de aquello que socava el autodominio, la de respeto a lo creado y a la vida, pero de manera especial, la caridad que se traduce en acciones solidarias y de ayuda a los más marginados, esta actitud es piedra angular o piedra de tropiezo, finalmente, para la actitud mística. El principio lo formula el Apóstol san Juan: «todo el que no practica la justicia no es de Dios, ni tampoco el que no ama a su hermano» (1 Jn 3, 10).

          Un distintivo particular de una fenomenología de la religión tiene que ver con el tratamiento de lo simbólico. El símbolo, en su expresión religiosa más alta, transmite la presencia de lo trascendente; se convierte en sacramento, signo sensible y eficaz que comunica la vida divina.

          La filosofía analítica, por su parte, ha estudiado los argumentos para la demostración de la existencia de Dios, sobre todo, en la adecuación de nuestro lenguaje para hablar de su esencia y atributos. A la par, la posibilidad de los milagros frente a la ciencia, el alma, la vida después de la muerte y la compatibilidad del mal respecto a la existencia de Dios. En este esfuerzo demostrativo, sobresalen históricamente dos posiciones: la del argumento ontológico de San Anselmo, y las cinco vías de Santo Tomás de Aquino.

          Pero hoy en día, se perfila una postura intermedia, es decir, una postura analógica en la comprensión de lo religioso. Partiendo del hecho de que se puede decir algo de Dios sin caer en afirmaciones categóricas, al mismo tiempo que permite reconocer la enorme distancia que hay entre el conocimiento humano y la realidad de Dios. Se procede así, más por comparación desmedida que por un conocimiento absoluto de la naturaleza de Dios.

          La filosofía de la religión, en síntesis, nos abre el panorama de la religión como objeto de estudio. De las dos aproximaciones a este objeto de estudio, la analogía abre nuevas formas de comprender la religión. Además, permite afrontar mejor los cuestionamientos que de diferentes disciplinas se hacen a la religión, dando nuevas respuestas a preguntas, muchas veces, antiguas, pero con un enfoque diferente. No pretende, por último, tener la última palabra, sino demostrar que la religión también tiene  sus argumentos que la hace razonable.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Filosofía, ¿amor a la sabiduría?

Breviloquium Filosofía, ¿amor a la sabiduría? 27 de febrero de 2022           Hablar de filosofía es hablar de un estilo de vida apasionante, que va más allá de las apariencias, que busca encontrar aquello que aún no sabe si lo hallará, pero que genera una emoción por el simple hecho de buscar. La filosofía, para nosotros los creyentes, viene bien porque siempre estamos en búsqueda de algo o de Alguien. Hablemos un poco de este saber.            La definición etimológica de filosofía nos dice que se trata del «amor a la sabiduría». Esta definición surge a raíz de que los primeros pensadores griegos se llamaban a sí mismos «sabios», y Pitágoras, por modestia, quiso ser llamado «amante de la sabiduría» o «filo-sofo», de ahí resulta el término que hoy conocemos. Pero esta definición pronto se quedó atrás. En los tiempos de la auténtica cultura griega, filosofía es identificada con la sabiduría misma.            Santo Tomás de Aquino dirá que el sabio es quien busca la sabiduría por

La teología de la historia de San Buenaventura

Breviloquium La teología de la historia de San Buenaventura 26 de marzo de 2023           Siendo Papa Benedicto XVI, dirige en la primera de tres catequesis sobre San Buenaventura, las siguientes palabras: «Hoy quiero hablar de san Buenaventura de Bagnoregio. Os confieso que, al proponeros este tema, siento cierta nostalgia, porque pienso en los trabajos de investigación que, como joven estudioso, realicé precisamente sobre este autor, especialmente importante para mí. Su conocimiento incidió notablemente en mi formación» ( Audiencia , 3 de marzo de 2010). Presentamos la obra que fue fruto de esos trabajos de investigación y que sirvió para su habilitación docente del joven teólogo Joseph Ratzinger.             Hablamos de La teología de la historia de San Buenaventura , publicada originalmente en alemán en l959 y traducida al español en 2004 por Ediciones Encuentro. A la mano tenemos la segunda edición de 2010, la cual abre sus páginas con un Estudio introductorio de Mons. Jesús San

La samaritana, modelo de discípulo misionero

Breviloquium La samaritana, modelo de discípulo misionero 13 de febrero de 2022           San Juan, el evangelista, nos ha dejado el pasaje del encuentro de Jesús con la samaritana (Jn 4, 1-42), un relato muy persuasivo para asumir una actitud de discipulado y misión en esta hora que nos toca vivir. En este pasaje podemos advertir cinco momentos en los que Jesús desarrolla un camino de evangelización que lleva de alguien del encuentro con el Maestro, hasta su envío como misionera, como apóstol de los suyos.           La puerta de entrada al relato (vv. 1-6) nos habla de la preocupación que tiene Jesús y la voluntad divina por encontrarse con alguien, es decir, tú y yo. Algunos se han dejado ya encontrar por Jesús y reconocen este momento, otros más puede que estén a punto de ser encontrados por Él. No lo sabemos, pero no tenemos dudas. La voluntad de Dios es un misterio que siempre juega a nuestro favor.           Una vez que el Señor se encuentra con alguien, lo primero que Él